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alborada


























              El puente El Sambo                                    Laboratorio de Laurent

                 Charles Cliff ord (1820 – 1863),   nazan con destruir nuestras frágiles cu-  rio puntualizar que desconocemos si
              fue un fotógrafo galés, contemporá-  betas, lentes, placas y probetas”.  hay constancia de que ya dispusiese
              neo de Jean Laurent, que se dedicó     El viaje en tren de J. Laurent para   de esta utilidad en 1858, y de que se
              a fotografi ar la España cambiante y   realizar el trabajo del camino de hie-  hubiera transportado hasta Alicante.
              exótica que tanto juego daba para   rro Madrid – Alicante, podemos su-
              vender imágenes en los países eu-   poner que fue menos desagradable.   EL FOTÓGRAFO
              ropeos. La península ofrecía a esos   En el vagón del tren podría llevar,   Jean Laurent Minier nació en Gar-
              primeros fotógrafos oportunidades   todos los equipos y químicos necesa-  chizy, Nevers (Francia) el 23 de Julio
              para captar imágenes de temas y am-  rios sin tanto peligro de rotura y en   de 1816. Se trasladó a vivir a Espa-
              bientes inexplorados. Sin embargo   cantidades sufi cientes para abordar   ña en 1843, cumplidos los 27 años.
              las numerosas difi cultades derivadas   el proyecto. Como ejemplo podemos   Establecido en Madrid cambió su
              de las condiciones precarias de tra-  ver la fotografía de los años 1866 a   nombre francés por Juan. Contrajo
              bajo eran casi insalvables.         1868, donde se observa el laborato-  matrimonio con Amalia Daillencq,
                 Cliff ord nos ha dejado un relato   rio móvil de Laurent montado sobre   viuda de un pastelero, lo que le per-
              de cómo eran las condiciones del tra-  un vagón de tren, aunque es necesa-  mitió trabajar como cartonero espe-
              bajo fotográfi co:                                                       cializado en la elaboración de cajas
                 “Las difi cultades de un fotógrafo no                                 de lujo para pastelerías y papeles
              son pocas, mientras se viaja en un país                                 marmolados para la encuadernación
              donde se desconocen las comodidades                                     de libros. En 1855 se interesó por la
              del transporte; y dónde la temperatura                                  fotografía, coloreando copias en pa-
              varía al mediodía entre 32º y 43º, no                                   pel, al mismo tiempo que aprendía
              menos de 26,5º a la sombra; dónde el                                    las técnicas fotográfi cas del momen-
              agua destilada se la encuentra tan co-                                  to, las cuales llegó a dominar con
              rrientemente como en el Sahara y en el                                  prontitud. En 1856 puso en funcio-
              que, debido a la extrema sequedad del                                   namiento su estudio fotográfi co en
              suelo, el polvo es la regla y no la excep-                              el nº 39 la Carrera de San Jerónimo,
              ción. Añádase a esto el hecho de que, por                               cerca del Congreso de los Diputados.
              imperativos del considerable tamaño de                                  Casualmente este local fue utilizado
              las fotografías, el equipo es necesaria-                                por Charles Cliff ord en un período
              mente grande y puede llegar a pesar 300                                 anterior.  Posteriormente, en 1884-
              kilos. Con toda esta parafernalia debi-                                 85 construyó un edifi cio en la calle
              damente equilibrada y sujeta a lomos de                                 Granada 16, en el barrio de Pacífi co,
              mulas y hasta nuestra animosa persona                                   de Madrid. Según lo describió en el
              cargada de similar manera, iniciamos                                    proyecto, el arquitecto Ricardo Ve-
              nuestras expediciones a las cuatro de la                                lázquez Bosco, amigo de Laurent,
              mañana. Imagínense nuestra excitación                                   era una casa “destinada a habitación
              y desasosiego a cada tropiezo y bambo-                                  y talleres de estampación del estableci-
              leo de estos orejudos animales, que ame-  Caricatura de Laurent         miento fotográfi co de los Señores Lau-

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