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alborada

En el Introito del Tomo IV, fecha- de Alberto Navarro. Estamos ante denses notables (2000) o Las Fiestas
do el 2 de octubre de 1949, Alberto un hombre minucioso, paciente, de Elda (2003), entre otros. Y que
Navarro informa que lo dedica “a los pulcro, ordenado... con muy buena deberían servir para que los investi-
programas de fi estas de septiembre mano para el dibujo y un gran sen- gadores se adentrasen, desde aquí, al
ofrecidos por D. Vicente Martínez tido estético del conjunto recopilado resto de material del legado que qui-
Romero para este álbum”. Y en efec- en cada tomo. Interesado por todo lo zás guarde entre sus hojas no pocas
to, la extensa colección de programas que ocurre a su alrededor o bien por sorpresas, contribuyendo a calibrar
festeros recogidos, de 1883 a 1935, todo aquello que rescata del pasado así con más perspectiva el conjunto
suponen -en palabras del propio y tiene que ver con la ciudad: nada de una obra tan valiosa e interesante
autor y de modo inmodesto, como de ella le es ajeno, sean sus fi estas, para la ciudad.
aclarará después- “la única colección el deporte, las letras, las labores del Cuatro tomos que rezuman, hoja
completa, conocida, de festejos, lo calzado... y no se abstiene de fanta- tras hoja, el afecto ilimitado de Al-
que eleva en muchos grados el ran- sear, recreando con su toque perso- berto Navarro por Elda y sus gentes,
go y valor de este Álbum de Elda que nal algunas historias y leyendas de la por todo el legado que el tiempo nos
ya es, desde el 2º Tomo, la verdadera tradición eldense. aporta, por su memoria viva. Cua-
Enciclopedia- Museo de Elda y un li- Cuatro tomos que nos hablan cla- tro álbumes entrañables, delicados
bro único en la bibliofi lia mundial”. ramente del callado trabajo que su y dignísimos, absolutamente inolvi-
Completan el tomo varios artículos autor emprende ya desde su juven- dables. Y que nos ayudan a valorar
referido a la Alborada o El centenario tud para ir haciendo acopio de cuan- aún más si cabe “a esa persona lle-
de 1804, entre otros. ta información le servirá para sus li- na de curiosidad, tan discreta como
Cuatro álbumes cuyo valor es bros futuros Historia de Elda (1981), apasionada en profundizar en sus
insustituible para adentrarse en la Vida y versos de El Seráfi co (1982), La propios intereses, tan docta como
personalidad, los intereses, la me- prensa periódica de Elda (1998), Las fascinante”, en palabras de Consuelo
todología de trabajo o la creatividad Bandas de Música de Elda (1998), El- Poveda.

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