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Leal, Sacra / CURRÍCULUM IN VITRO / Grupo Carasses y
Cuentamontes. Elda, 2015

Tercer poemario de Sacra Leal, tras Revolución dolo con versos de su admirada Santa Teresa y
del llanto (1994) y Pájaros en la memoria (2007), cerrándolo con una preciosa carta de recomen-
Currículum in vitro prosigue esa línea personal dación que le dedica su hermana Leticia y que
de la eldense en la que la sensibilidad y la emo- pone un broche de oro al conjunto: Sacra, nos
ción nos muestran la unión entre lo cotidiano y lo dice la recomendación, “no solo posee la habili-
extraordinario hasta hacernos conjugar un mun- dad suficiente para remendar nubes de poemas
do real y hechizado a la vez, en el que sobresa- sobre cielos albos de papel sino que además en-
len la fuerza y el aliento de su actitud siempre hebra a la perfección palabras que anuncian vís-
animosa ante todo contratiempo. peras de tormenta y tempestades de puro amor
por la existencia misma”.
Los 49 poemas del libro se organizan en cuatro
apartados. En el primero, Datos impersonales, la Editado por el propio grupo Carasses Teatro,
autora (hacedora de versos, maceradora de pa- con la colaboración de Cuentamontes (cuyo cer-
labras, actriz, madre, ama de casa...) nos habla tamen de poesía de montañismo y naturaleza, en
de sí misma, de su crecimiento personal, de sus su categoría internacional, lleva el nombre de la
dudas, de sus sinsabores y contratiempos pero poeta), estamos ante un poemario reflexivo y de
sin dejar de remarcar la importancia de vivir el plena madurez, un intento de aproximación a sí
momento, de “nacer de nuevo / Cada día, cada misma y al mundo pero desde el desdoblamien-
instante”. Y aunque no se acostumbre a “la tinta to que ofrecen la edad y la conciencia. Sirvién-
indeleble de la desmemoria” o tenga que lidiar dose además de un lenguaje sencillo pero muy
con el desasosiego, constata que sigue viva, cuidado, con imprevistas imágenes que siempre
que cada día “añado una semilla más a mi exis- nos sorprenden; y una sutil y elegante ironía (a
tencia”. El segundo va dedicado a mostrarnos su veces) que le dan un vuelo tan ligero como libre
poética, los referentes (pesan mucho Juan Ra- por singular.
món, León Felipe y cuantos poetas eligen esa op-
ción que “se llama libertad”) o los motivos de su Rafael Carcelén
escritura: “Escribimos para seguir viviendo, pese
a todo, pese a nadie, sobre la cúpula nefasta del
último suspiro”. Hasta concluir: “Soy libre / Escri-
bo para desgarrarme la memoria / desvirgarme
la conciencia / destartalarme el equilibrio.”

Experiencia vital, tercera sección del poemario,
se erige en su núcleo central. En él vemos a la poe-
ta y a la mujer preocupada por sí misma (amor /
desamor, conciencia, etcétera) pero también por
la situación del mundo en el que vive (España, los
refugiados, el hambre...) o por la propia situación
de la mujer. Pero tampoco hay en estos versos,
a pesar de los pesares, lugar para el desánimo:
“Mis sueños siguen siendo más grandes que mis
pesadillas / Mi esperanza más voluminosa que
mi desengaño”. Como perenne superviviente de
sí misma, siempre emerge del naufragio, hasta
concluir que “somos algo más que esta eterni-
dad de palabras vacías que nos habitan”. Con-
cluye el libro con las referencias a sus aptitudes
(y enfatiza el “Pienso / luego / insisto”), rubricán-

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