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alborada regaló el fabricante después de uno pecial y que me gustan mucho. Son pero no me representaban tan bien
como este par).
negros, que es mi color (o no color)
de los desfiles de la Feria y que lle-
favorito, pero con un toque de otro
vaste en uno de los primeros bailes
El 2001 era, para mí, el año en
color, rojo en este caso, y aunque
que empezaba el futuro de nuestro
de tu vida.
Porque yo, desde los quince años,
son sencillos, tienen un par de to-
planeta, el primer año del nuevo mi-
lenio. Por muchas razones el 2001
ques juguetones: los agujeritos y
fui modelo de calzado en la Feria de
fue un año fantástico, maravilloso
Elda y, al tener la suerte de calzar pie
el lazo. ¡Y todo el interior es rojo,
de muestra, he caído muchas veces
para mí.
como la capa de Drácula! Lo mejor
es que son de punta aguda, mi fa-
Estos zapatos me acompañaron
en la tentación de comprarme zapa-
tos maravillosos a precios increíbles
bruja, y eso es algo que representa
una tiene relación con mi faceta de
y que en ocasiones no he llevado más
lo que yo soy, a veces . Tienen ta-
que una o dos veces.
escritora, la otra con mi faceta de
profesora universitaria.
Para elegir los zapatos que hoy vorita, porque parecen zapatos de en dos ocasiones que quiero resaltar:
cón y sirven para arreglarse, pero
entrego, me he guiado por los si- se puede andar perfectamente con En 2001 tuve el honor de inaugu-
guientes criterios: ellos y hasta correr, si hace falta. rar el Festival Utopiales en Francia,
Tenían que existir aún (los famo- en Nantes, dando la bienvenida en
sos zapatos de charol rojo se perdie- Ahora, la historia: cinco lenguas a los más de quinien-
ron, lógicamente) 2001 es un año importantísimo tos escritores, ilustradores, dibujan-
Tenían que representarme en para mí por varias razones. Cuando tes, editores y lectores de literatura
cierta medida (es decir, no podían yo tenía doce años se estrenó en el fantástica reunidos allí. Llevaba es-
ser ese tipo de zapatos de los que an- desaparecido cine Gloria una pe- tos zapatos.
tes hablaba, esos que una compra en lícula que sería crucial en mi vida: Ese mismo año, en Viena, y cal-
un impulso porque son preciosos y “2001: una odisea del espacio”, de zando estos mismos zapatos, parti-
luego no se pone casi nunca) Stanley Kubrick. Esa película, y la cipé en un gran Simposio Internacio-
Tenían que estar usados, pero no correspondiente novela de Arthur nal de Literatura Hispánica. La Em-
destrozados C. Clarke, hicieron que yo deseara bajada de España ofreció un cóctel a
Tenían que gustarme de verdad escribir ciencia ficción y me pusie- los participantes y allí, con una copa
ron en el camino que llevo cincuenta de vino en la mano, la esposa del em-
¡Estos son los elegidos! años recorriendo. bajador miró hacia abajo y me dijo:
Me los puse por primera vez hace Cuando llegó el 2001, yo tenía 44 ¡Qué preciosidad de zapatos llevas!
17 años y, si me permiten, voy a con- años, ya era escritora, y profesora en ¿De dónde son?
tarles por qué cumplen los criterios y la universidad de Innsbruck, llevaba Y entonces pude decir con todo el
cuál es su historia. muchos años viviendo en Austria y orgullo del mundo: “De Elda, claro,
en septiembre del año 2000 había de mi pueblo.”
El simple hecho de que unos tenido el honor de ser elegida prego- A partir de ahora, estos zapatos
zapatos que estrené hace 17 años nera de las Fiestas Mayores de Elda. estarán mirando el mundo desde su
sigan existiendo en mi armario ya (Podría haber elegido para el museo vitrina en el Museo del Calzado de
indica que les tengo un cariño es- las sandalias que llevé entonces, Elda, de mi pueblo.

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